EL SUBTÍTULO
«EL CABALLERO DE
LOS FOGONES»
Pedro es un caso singular
dentro de la gastronomía
española y, especialmente, en
la madrileña.
Es un chef elegante, discreto,
de pocas, sabias y meditadas
palabras. No es dado a las
exageraciones ni a lo
estrafalario gastronómico.
Y eso, que se percibe a las
pocas palabras cruzadas con
él, se transmite a su cocina.
Platos serios, elegantemente
construidos. Con estilo y clase.
Sin escenificaciones
innecesarias. Con una
elegancia innata que es la
misma que él transmite.
Por eso, mis compañeros, en
concreto mis compañeras, le
definen como «el caballero de
los fogones». Y no les falta
razón. Es todo un caballero de
la cocina de nuestro país,
sólido y con consistencia. Algo
que sólo se consigue desde la
sabiduría y desde el esfuerzo.
Cosas que Larumbe derrocha
a raudales.
Jose Ignacio M. Sánchez